Las elecciones madrileñas están a la vuelta de la esquina y parece ser que todas las consultas demoscópicas dan una abultada victoria a Isabel Díaz Ayuso, sarna con gusto no pica. La presidenta de la Comunidad de Madrid estaría en posición de ganar por mayoría absoluta absorbiendo en su totalidad a Ciudadanos y rebañando un buen puñado de votos a la extrema derecha, que se defiende como gato panza arriba con su último numerito de los carteles con los MENAS como protagonistas.
Si has leído hasta aquí y estás pensando; "Este tio (o tia) me va a venir con la lucha de clases para lavarme el coco". Libertad o comunismo rezan en su eslogan. Pues sí, claro que tiene que ver con la lucha de clases. Ayuso no dudo en dejar morir a miles de ancianos en residencias semiprivatizadas porque no quería meter ni un euro en la Sanidad Pública para luego tener la poca vergüenza de echarle la culpa al último en llegar (esto va de décadas de privatizaciones del Partido Popular). No dudo en utilizar el dinero público para desviarlo a entidades privadas como constructoras, gestorías y hasta asesores para la realización de un hospital fantasma; El Zendal. La asistencia primaria absolutamente colapsada y ella haciéndose fotos en quirófanos sin médicos ni materiales. NO DUDO en perimetrar a barrios enteros de clase obrera mientras dejaba con total libertad a barrios de clase alta y centros comerciales. La "chusma" que vaya a limpiar la casa del señorito y que luego vuelva a su "gueto", en un metro atestado y se encierre en su casa para "no contagiar". No sabría decir si lo de contagiar va únicamente por el Covid.
Por último, los impuestos. La psociópata de Ayuso ha hecho del tema su gran valedor para la campaña. La bajada de impuestos que beneficiará a todos los madrileños porque "se reacudará más y generará más riqueza". No te engañes amigo lector/a, la bajada de impuestos sólo beneficia a las clases pudientes de Madrid, se recaudará menos y habrá que hacer recortes. Más aún. Y si crees que, siendo el resultado de horas de manipulación, tienes esa infula de cobrar un poco más del salario mínimo y creer que tus intereses fiscales son los mismos que los de Florentino Pérez o los Amancio Ortega estás muy equivocado. Esto si va de clases, si va de "la libertad de unos pocos" contra el bienestar general. Si va de ellos o nosotros, de clasismo o igualdad, de lo público contra lo privado, de su Mercedes contra tu pan.