Ha pasado un mes desde que Isabel Díaz Ayuso designara a José Antonio Sánchez como director de Telemadrid tras cesar a todos los miembros de la directiva que, hasta aquel momento, manejaban la cadena autonómica. Los cambios se reflejaron también en la parrilla de la televisión, de la que desapareció el programa Está pasando a pesar de sus buenos e históricos datos de audiencia —por motivos políticos, se llegó a asegurar—. Ahora, los datos demuestran los daños que el “asalto” de la presidenta de la Comunidad de Madrid ha provocado. Sánchez fue ya director general de Telemadrid bajo los mandatos de los expresidentes Esperanza Aguirre e Ignacio González, durante los años 2011 y 2014. Fue el encargado de ejecutar el ERE que supuso la salida de más de 800 trabajadores.
Y es que el cine Wéstern y su caída en picado hasta el 1,5% de audiencia parece condenar al resto de la parrilla, con un 3,1% Madrid Directo (frente al 11% de media que alcanzaba antes de la influencia popular) y un 4,5% Telenoticias 2 (que previamente se mantenía en un 13%). Datos que reflejan cómo la llegada de Sánchez a la directiva, escogido a dedo por Ayuso, se ha cargado de un plumazo la audiencia de Telemadrid justo cuando el ente público empezaba a ganar credibilidad y a cosechar éxitos de audiencia.
No hay comentarios:
Publicar un comentario