La conspiranoia Trumpiana se cuela en el "Prime time" español

Iker Jiménez (Prime time de Telecinco, una de las cadenas con más audiencia en España) ha entrevistado este pasado jueves en exclusiva a Li Meng-Yan, la viróloga china que huyó de su país tras afirmar que el SARS-CoV-2 (conocido popularmente como Covid-19) fue creado de forma artificial y no surgió naturalmente. El programa ‘Horizonte: Informe Covid’ quiso saber cómo ocurrieron los hechos, desde ese fatídico diciembre de 2019. “En esa fecha estaba haciendo un trabajo de referencia de la OMS para la gripe H5”, comenzó relatando la doctora. “El consultor de la OMS Leo Poon le puso una tarea en exclusiva: revisar el virus de Wuhan desde el 31 diciembre al 3 enero”. Así fue como Li Meng-Yan comenzó sus investigaciones respecto al coronavirus.

No tardó mucho en, según ella, advertir un hecho: "Los virólogos ya habían aislado el virus y descubrieron la secuencia del coronavirus". "Alerté a mi supervisor pero decidieron no publicar la información", aseguraba a Iker Jiménez, momento en el que la retiraron de la investigación y la doctora comenzó varios estudios por su cuenta, con la ayuda de otros colegas y siempre con mucha cautela. "El Gobierno de China se negó a permitir que los expertos extranjeros, incluidos los de Hong Kong, investigaran en China (…) Recurrí entonces a mis amigos para recabar más información”, explicó acerca de sus descubrimientos. Así fue cómo un amigo del Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades de China le informó de que el nuevo coronavirus se transmitía de persona a persona. Hasta ese momento, ni el gobierno chino ni la Organización Mundial de la Salud (OMS) habían informado públicamente de ello. ”El gobierno de China insistía en que aún no había pruebas de transmisión entre humanos", relataba.

Pero además de eso circula un artículo firmado por la propia viróloga exiliada y otros tres científicos. Su título es 'Características inusuales del genoma del SARS-CoV-2 que sugieren una modificación sofisticada en el laboratorio en lugar de la evolución natural y la delineación de su probable ruta sintética' y rechaza la hipótesis de que el coronavirus SARS-CoV-2 se originó en la naturaleza y señala que fue creado en un laboratorio. 

El artículo no tiene ninguna evidencia científica sólida, la mayor parte de las referencias que citan son o artículos que aún están en preprint (no revisados por pares) o fuentes similares de conspiranoicos, no publicaciones científicas; y cuando citan muchas publicaciones científicas es para decir que no se creen lo que dicen. La ola creada por los radicales republicanos en EE.UU. se ha colado en el prime time de muchas televisiones a lo largo del globo (ésta en cuestión es la primera que concede en Europa). En la política española VOX ha hecho declaraciones culpando directamente a China de las muertes por COVID-19, en el debate de la moción de censura de hace menos de una semana e incidiendo en un odio que puramente incide en lo comercial dictado por Donald Trump.