En los entresijos de la gestión sanitaria en la Comunidad de Madrid, se esconde una historia que combina negocios, relaciones personales y contratos millonarios. El protagonista: Fernando Camino, cofundador de una sociedad panameña y actual presidente de Quirón Prevención SL. Pero ¿Qué papel desempeña en la salud de los madrileños?
Hace dos décadas, el holding Quirón se benefició enormemente de la privatización de hospitales en Madrid. Sin embargo, su influencia no se limitó a la adquisición de centros médicos. En 2018, Quirón Prevención SL obtuvo el primer contrato para realizar chequeos médicos a la plantilla de la Comunidad de Madrid, compuesta por más de 159,000 empleados. ¿Quién firmó esa adjudicación? Nada menos que Isabel Díaz Ayuso, en ese momento viceconsejera de Presidencia y Justicia, y ahora presidenta de la Comunidad de Madrid.
Aquí entra en escena Alberto González Amador, pareja de Ayuso. González Amador tiene una conexión previa con Camino: ambos compartieron una empresa panameña llamada Insumos Médicos del Pacífico SA. Camino fundó esta empresa en 2013, y González Amador fue apoderado de Fraterprevención, una de las cuatro compañías que se fusionaron en 2018 para dar lugar a Quirón Prevención SL. Curiosamente, esta última empresa se convirtió en la encargada de los reconocimientos médicos en la Comunidad de Madrid.
Los contratos obtenidos por Quirón Prevención SL para los chequeos médicos sumaban 1,321,689 euros según los expedientes correspondientes. Pero las prórrogas sucesivas han duplicado ampliamente esa cifra. En total, se han otorgado ocho prórrogas para los dos contratos, lo que representa un monto considerable.
En el segundo concurso, resuelto en abril de 2021, Quirón Prevención SL no tuvo competidores. Su oferta fue la única presentada al Ejecutivo madrileño. La exclusión de la otra empresa aspirante, Más Prevención Servicio de Prevención SL, se debió a la falta de acreditación de su representante.
Alberto González Amador, hasta días antes de que Hacienda iniciara actuaciones de comprobación en 2022, ocupó el puesto de director secretario de Insumos Médicos del Pacífico. Esta sociedad panameña, donde también figuraba como directivo, es parte fundamental de la trama. La Agencia Tributaria acusa a González Amador de utilizar facturas falsas para desviar beneficios millonarios durante la pandemia.
En resumen, la relación entre el novio de Ayuso, la sociedad panameña y los contratos millonarios para los chequeos médicos en la Comunidad de Madrid plantea interrogantes sobre transparencia y ética. Los madrileños merecen una gestión sanitaria impecable, y esta historia nos recuerda la importancia de la vigilancia ciudadana y la rendición de cuentas en el ámbito público.
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